Gilles de Bretaña, el príncipe anglófilo asesinado

 

Gilles de Bretaña (1420-1450)

Autor: Pierre Scordia

El caso de Gilles de Bretaña escandaliza a la mayoría de sus contemporáneos en el siglo XV y XVI. Este asunto cambia dramáticamente el curso de las relaciones anglo-bretonas y conlleva graves consecuencias incluso en el paisaje político anglo-francés.

Gilles de Bretaña es el tercer hijo del duque Juan V, y su preferido según las crónicas. De niño pasó dos años en la corte de Enrique VI haciéndose amigo del rey, del que recibe una pensión anual de 250 marcos. Según el cronista Bourdeaut, también habría sido acogido por el conde de Warwick, el "hacedor de reyes" durante la Guerra de las Dos Rosas en Inglaterra. Esta estancia, deseada por Juan V, respeta la tradición de los Monfort: un miembro importante de la familia ducal debe residir en Inglaterra. Se dice que a Gilles le sedujo la Corte inglesa y que él mismo poseía rasgos típicos del carácter inglés: hombre ambicioso, altivo, violento, cultivado, con un gusto por el lujo; une el honor con la riqueza, valores propios del espíritu caballeresco de Occidente en los siglos XV y XVI. No faltan elogios de los nobles ingleses hacia los buenos modales del príncipe bretón.

Si bien la anglofilia de Gilles no le causa teóricamente ningún mal en la corte de Nantes, sus ambiciones molestan. Desde la muerte de su padre se queja de su triste suerte a su hermano Francisco, el nuevo duque, príncipe más bien benevolente cuando se trata de intereses franceses. A Gilles le repugna la idea de rendir homenaje, obediencia y lealtad a Carlos VII de Valois pretendiente al trono de Francia al que no reconoce. Este homenaje está ligado a sus nuevas tierras angevinas de Chantocé y de Ingrandes confiscadas  a Gilles de Rais y legadas por su difunto padre. Es así que uno puede preguntarse sobre la sinceridad del afecto de Juan V por su tercer hijo. ¿Si Gilles era su preferido, por qué el viejo duque le dejó en su testamento los señoríos angevinos que habían pertenecido al horrible Gilles de Rais? ¿No hubiera preferido legarle un rico señorío breton con el fin de dispensar a su hijo anglófilo del homenaje ligado al rey de Francia? Gilles pide en vano que se le conceda en vez de esto un patrimonio bretón, para ahorrarle esa afrenta.

Al principio de su reinado, Francisco I, cuidadoso de preservar la política bretona de neutralidad en el conflicto anglo-francés, se sirve de su hermano menor. Envía a Gilles a la cabeza de una embajada a Enrique VI de Inglaterra y le pide en esa misma ocasión abogar ante el rey por la restitución del condado de Richemont, en Inglaterra. Gilles, poco interesado en los intereses de su hermano mayor, prefiere consagrar su tiempo a sus asuntos y solicita de los Lancaster la obtención de algún rico patrimonio bretón. Enrique VI so solo le defiende sino que también le acuerda una pensión anual de 2.000 nobles. Gilles, satisfecho de este apoyo, le rinde homenaje de fidelidad. Este acto desencadena, evidentemente, la cólera de Carlos VII que confisca los dominios pertenecientes a Gilles: los señoríos angevinos de Chantocé y de Ingrandes. Estas represalias ponen a Francisco I en una situación incómoda y este opta finalmente por el mal menor, negociando con el soberano francés antes que conceder un patrimonio bretón a su hermano. Gilles obtiene a cambio la titularidad de Chantocé pero debe abandonar los derechos de los Monfort sobre la baronía de Rays. Las cosas se complican cuando las tropas del duque de Somerset, con la intención de presionar a Francisco I para que satisfaga las demandas de Gilles, saquean La Guerche en diciembre de 1443. Esta iniciativa contraproducente provoca la cólera del duque de Bretaña que llama enseguida a su hermano en Inglaterra. Gilles, convencido a su vez de su fuerza por el apoyo diplomático y militar de los Lancaster, se vuelve amenazante. Este llega a alojarse en la Francia inglesa (en Guyenne y en Normandía) para hablar con los capitanes y urdir una estratagema.

El 26 de  julio de 1445, Francisco I intercepta una carta de Gilles dirigida a Enrique VI en la cual le anuncia que en caso de un nuevo rechazo de su hermano, está dispuesto a entregar a las tropas inglesas los dominios de la joven y rica Françoise de Dinan a la que ha raptado y con la que se ha casado en 1444. Esta niña de ocho años, la heredera más rica del ducado, es una de las mujeres más codiciadas. Por este golpe de fuerza, Gilles se convierte en uno del los señores más poderosos de Bretaña ya que controla Saint-Malo, Moncontour, plazas fuertes de las que con anterioridad su hermano le había nombrado gobernador, así como los señoríos de Châteaubriant, de la Hardouinaie, de Montafilant y de el Guildo. Por este matrimonio, Gilles se gana enemigos: Arthur de Montauban y el conde de Laval, los dos, pretendientes a la mano de la rica heredera. Por otra parte, Francisco I debe entregar 20.000 escudos a Guy XIV de Laval. en compensación. Por el mismo motivo, también acuerda 6.000 escudos a la familia de Rohan.

Acordémonos de que en el contexto político bretón, Gilles tiene tanto derecho a ser pensionista del rey de Inglaterra como su tío, el duque de Richmont, de serlo del rey de Francia. Lo que inquieta al duque de Bretaña, hombre celoso de sus prerrogativas casi reales, es la amenaza de una invasión extranjera, ya sea francesa o inglesa. Sin embargo, cara a la hostilidad creciente de su hermano, Francisco I comienza a temer una intrusión lancastriana en su ducado. No obstante, bajo la amenaza de su tío Arthur que teme sobre todo una lucha en fratricida en la casa de Monfort, perdona por primera vez la traición de su hermano el 19 de octubre de 1445, a cambio de una renuncia por pare de Gilles al mandato de Saint-Malo y de Moncontour.

El error de los ingleses ha sido el no haber evaluado bien el aislamiento creciente de Gilles en la corte de Nantes ni las pérdidas estratégicas incurridas por la desaparición de una administración pro inglesa en los puertos de Saint-Malo y de Moncontour. Al contrario, han apostado por una política bretona basada en Gilles: el 25 de octubre de 1445, Enrique VI pide a Francisco I que conceda un dominio bretón a Gilles y que respete la alianza acordada entre su padre Juan V e Inglaterra en nombre de los lazos familiares que unen a los Monfort y a los Lancaster. Aún peor, el partido Lancaster radicaliza a Gilles en su intransigencia, en su belicismo, prometiéndole el rico condado inglés de Richemont.

Ciertos capitanes ingleses más prudentes, como Thomas Hoo, Robert Roos, Guillaume Roskill, aconsejan a Gilles y a su mujer abandonar Bretaña mientras puedan. Temen por su seguridad, pero Gilles permanece allí. Se queda en su castillo de Guildo y llega a la temeridad al decir al enviado del duque de Bretaña, Jean Hingant, que su hermano Francisco es su mortal enemigo, que está dispuesto a ir a buscar ayuda en Inglaterra para combatirle. Además, se propagan rumores en las cortes europeas, en las que se alega sin pruebas que Gilles habría recibido la Orden de la Jarretera y que  habría aceptado el título de condestable de Inglaterra.

Frente al peligro de una invasión inglesa, Francisco I no tiene otra elección más que neutralizar a su hermano y de congelar las relaciones con Enrique VI que conspira contra sus intereses. Condena a Gilles por alta traición y pide al rey de Francia que le envíe lanceros del Mont-Saint-Michel para arrestare. Con este gesto quiere evitar que se le acuse de haber orquestado su arresto por venganza personal. Durante su detención, Gilles es asesinado por Arthur de Montauban, hombre a sueldo del duque Carlos VII, extremadamente celoso de Gilles, ya que el había deseado también la mano de Françoise de Dinan. La encarcelación de Gilles y luego su asesinato, percibido como un acto fratricida en Europa y sobre todo en Inglaterra dan un golpe fatal a la vieja neutralidad bretona benevolente con Inglaterra y desencadena el reinicio de las hostilidades anglo-francesas. La ruptura de la alianza anglo-bretona supone el fin de la Normandía lancastriana y de la presencia inglesa en el continente.

Coronación del duque Francisco I de Bretaña en Rennes

Glosario

 

Arthur de Montauban : (muerto en 1478) Gran noble Bretón, partidario de la alianza con Francia. Su padre había sido canciller de la reina de Francia, Isabel de Baviera, mujer de Carlos VI. Deseaba la mano de Françoise Dinan que casó finalmente con Gilles de Bretaña. Arthur de Montauban fue el instigador de los malos tratos y del asesinato de Gilles de Bretaña, hermano del duque Francisco I. Cuando el nuevo duque Pedro II quiso juzgar a los autores del asesinato de Gilles, Arthur de Montauban se refugió en la corte de Francia y se convirtió en uno de los favoritos de Luis XI.

Carlos VII, rey de Francia: (1403 - 1461) Hijo de Carlos VI y de Isabel de Baviera,  se alejó de la sucesión en 1420 en provecho de Enrique V de Inglaterra y de sus descendientes. Objeto de burlas y de injurias, conocido con el nombre de "el pequeño rey de Bourges", recuperó la corona de Francia después de un largo combate. Se sirvió especialmente de Juana de Arco para establecer su legitimidad.

Francisco I, duque de Bretaña: (1414 - 1450) : hijo mayo Juan V y de Juana de Francia. Fue responsable del arresto de su hermano Gilles de Bretaña. El asesinato de este último, durante su encarcelación, le atormentó y manchó su imagen internacional. Puso fin a la política de colaboración entre Bretaña e Inglaterra. Se casó con Isabel de Escocia.

Francisco I

Fançoise de Dinan: (1436 - 1499) : Hija de Jacques de Dinan y de Catherine de Rohan. Se la consideraba la más rica heredera de Bretaña. Fue secuestrada a la edad de 8 años y casada por la fuerza a Gilles de Bretaña. Cuando arrestaron a su marido a ella también se la encerró. Una vez liberada, fue casada a Guy XIV de Laval. Más tarde se convirtió en la gobernanta de Ana de Bretaña.

Gilles de Bretaña: (1420 - 1450) Desgraciado hijo de Juan V y de Juana de Francia. Partidario de la alianza con Inglaterra, amigo del rey Enrique VI, fue encarcelado por alta traición por orden de su hermano, Francisco I y asesinado por Arthur de Montauban.

Gilles de Rais: ( 1405 -1440 ) Señor de Bretaña y de Anjou, combatió con las tropas francesas, especialmente con Juana de Arco. De vuelta en sus tierras, se dedicó a las misas negras, a actos de pedofilia y a sacrificios humanos. Es considerado uno de los más grandes asesinos en serie de la historia de Francia. Durante mucho tiempo estuvo bajo la protección de Juan V de Bretaña a pesar de las sospechas que pesaban sobre él. Pero a fuerza de violar la inmunidad eclesiástica, fue arrestado y juzgado por orden del duque. Fue condenado a muerte por sus numerosos crímenes en Nantes y sus tierras fueron confiscadas por la corona ducal.

Enrique VI, rey de Inglaterra y rey de Francia: (1421 - 1471) Hijo del rey Enrique V y de Catherine de Valois. Consagrado rey de Inglaterra en la Abadía de Westminster y rey de Francia en la catedral de París -ciudad en manos de los Borgoñones. Vio sus derechos a la corona de Francia impugnados por el "delfín" Carlos VII de Valois. Al igual que su abuelo materno, fue víctima de crisis de locura, lo que obligó a su mujer, Margarita de Anjou, a gobernar en su lugar. Su regencia fue impugnada por Richard de York, lo que conllevó el principio de la guerra de las Dos Rosas.

Juana de Francia, duquesa de Bretaña: (1391 - 1433) hija de Carlos VI y de Isabel de Baviera, mujer de Juan V. Se mostró muy firme cuando su marido fue secuestrado en 1420 por los Penthièvre; no les hizo concesiones y continuó la política pro inglesa mantenida por su esposo. Madre de Francisco I, de Pedro II y de Gilles de Bretaña.

Robert Roos: contemporáneo del Regente Bedford y de Enrique VI. Roos fue nombrado embajador ingles en el tratado de Tours en 1444, tratado en el cual se concluyeron una tregua con Francia y un matrimonio real entre Enrique VI y Margarita de Anjou.

Somerset, Edmund Beaufort, duque de Somerset: (1406 - 1455) Hijo del conde Juan de Somerset, hermanastro de Enrique V y de Margarita Holland. Era también sobrino del arzobispo de Winchester. Fue uno de los principales jefes militares de el ejercito inglés durante la guerra de los Cien Años. Llegó a ser consejero del rey Enrique VI y favorito de la reina de Inglaterra, Margarita de Anjou. Somerset fue responsable de la política desastrosa en Francia. En Bretaña, fue el instigador del saqueo de Fougères a consecuencia del cual se rompió la alianza entre los Montfort y los Lancastre. Antes de obtener el titulo de duque, fue conocido por el título de conde y marques de Dorset.

Warwick, Richard Neville, conde de Warwick: (1428 - 1471) llamado el "hacedor de reyes". Noble muy poderoso, apoyó primero a Enrique VI, después cambió de campo durante la guerra de las Rosas y tomo partido por Ricardo de York. Participo activamente en destronamiento de Enrique VI y el entonamiento de Eduardo IV, hijo del duque de York. Sus relaciones con el nuevo rey se fueron degradando progresivamente , lo que llevó a un viraje en sus lealtades. Ayudó a Enrique IV y Margarita de Anjou a recuperar el trono de Inglaterra en 1470. Esto fue una victoria de corta duración, y que fue vencido y muerto en la batalla de Barnet en 1471.

Traducido por Claudio Sales Palmero. FΩRMIdea Valencia, el 20 de junio de 2018.

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