De Venezuela a Australia
Renacimiento Artístico de Jorge González
¿Con cuales materiales trabajas?
Usualmente trabajo con pintura acrílica en lienzo cuando pinto, y con marcadores de tinta, lápices de colores y/o acuarela cuando ilustro, sin embargo prefiero aplicar varios medios en mis trabajos.
¿Los colores poseen algún significado especial para ti?
Quiero pensar que los colores son el alfabeto que uso para comunicarme con el mundo, algunas veces los encuentro incluso más fáciles de usar que la comunicación convencional. El problema con eso es que no es entendible para la mayoría de las personas, o si lo es?
¿Prefieres pintar o dibujar?
No es una pregunta fácil de responder porque me gustan ambas cosas, cada una me permite expresar mis sentimientos e ideas en niveles diferentes. Mi pieza de arte ideal debería estar compuesta usando ambas expresiones artísticas, algo que estoy intentando conseguir en mis experimentos actuales.
¿Hay algún mensaje político o filosófico reflejado en tus obras?
No hay un mensaje intencional en mis trabajos y mis expresiones en general más que admirar y contemplar la belleza, la complejidad en los detalles. Quizás si los analizamos desde un punto de vista lógico, podría decirse que mi mente tiene una fascinación sobre la intervención humana en la naturaleza (para bien o para mal) en el caso de mis obras “cartográficas”, pero también como los estados de ánimo pueden ser interpretados a través de composiciones cromáticas.
¿Cual es la fuente de tu inspiración?
Desde que era niño, tenía una atracción especial sobre los mapas y libros de atlas, incluso en un momento de mi infancia soñaba con ser un cartógrafo, al igual que pintor y escritor, tristemente la mayoría de las personas me desalentaron a escoger esos caminos porque no eran “profesiones reales, similar al cuento de El Principito. Luego la adultez llego y me llevó por un camino muy diferente y más convencional... hasta ahora.
¿Tu trabajo está influenciado por el arte aborigen?
Bueno, yo aprecio y respeto mucho el arte aborigen, especialmente su genuinidad. En ese sentido, hay algo de influencia pero no de forma literal. Sin embargo, hay una artista llamada Dorothy Napangardi que me tiene fascinado desde que conocí sus trabajos en años recientes, representando muy bien su cultura pero también mostrándole al público una manera muy particular de trabajar los detalles, haciendo composiciones complejas casi matemáticas con simples elementos y colores, cosas que disfruto profundamente en cualquier tipo de expresión artística.
¿De donde eres?
Nací y crecí en Valencia, Venezuela, donde viví la mayor parte de mi vida antes de decidir migrar a Australia, 4 años atrás.
¿Cómo te sientes en relación al caos actual en Venezuela?
¿Por dónde comenzar? No es fácil explicar mis sentimientos al respecto. la comunidad internacional solo está mirando la punta del iceberg en este desastre socioeconómico en el que se ha convertido mi país. Tengo que confesar me enfurece cada vez que un izquierdista extranjero apoya ciegamente al gobierno venezolano desde cuando estaba Chávez, sin haber sido parte de nuestra historia o haber vivido en nuestro suelo como cualquier otro ciudadano, viviendo nuestros problemas como nosotros hemos venido haciendo desde hace casi 20 años. La corrupción es real, la he vivido, domina cada nivel del gobierno, y si, ha estado en el país antes de Chávez y Maduro, pero ahora la diferencia es que es descarada y envenenada de poder. Si, ellos fueron elegidos como en cualquier democracia, pero no es ningún secreto que todas las elecciones han sido manipuladas por el gobierno, no puedes creer en ninguna institución donde la corrupción es tan profunda y diseminada que ya ni creemos en los líderes de oposición y sus organizaciones. Seriamente hago una invitación a los izquierdistas que todavía siguen de acuerdo con el gobierno venezolano actual que migren a mi país, al menos por algunos meses y vivan como nosotros, sin ningún tratamiento especial o privilegio político, con la inseguridad de todos los días, con las largas colas, con la corrupción, que caminen en nuestros zapatos y luego podremos hablar.
Nunca he sido una persona política, tampoco mi familia, solo somos personas que creemos en el trabajo duro y honesto, desafortunadamente la mitad de mi país no parece pensar igual. Para cambiar y mejorar esta situación necesitaremos años, incluso décadas, la verdad incomoda es que la sociedad venezolana está herida, sus valores morales forzados a reprimirse, para lidiar con una cultura mafiosa armada con resentimientos hacia la democracia, cultura que se siente con derecho a robarte todo por lo que has trabajado la mayor parte de tu vida con tus propios logros solo por pensar diferente. Temo por mi familia y amigos, son un pensamiento constante en mi mente, lo único que puedo hacer al respecto es orar por ellos.
¿Que podría hacer el mundo para ayudar al pueblo venezolano en su lucha por la democracia?
La gente tiene que entender que el socialismo nunca funcionara, tenemos bastante evidencia en el pasado para reconocer que esa fórmula ha expirado. El soporte por parte de la comunidad internacional tiene que ser unánime, no con el gobierno de Venezuela sino con el pueblo venezolano. No estoy de acuerdo con ninguna intervención que implique la fuerza (como por Estados Unidos, por ejemplo), nuevamente tenemos experiencia suficiente que nos muestra que es una opción que nunca ha dado buenas consecuencias, igual que las sanciones políticas y económicas, deberíamos ser más inteligentes al respecto. El soporte de los medios de comunicación no debe ser sesgado por ninguna agenda política. El apoyo tiene que venir de todos los niveles de la sociedad internacional, con cualquier tipo de ayuda pero con un solo propósito: devolver la democracia a Venezuela.
Jorge González
¿Cómo te sientes sobre tu nueva vida en Australia?
Ha sido una Montaña rusa de emociones, sin duda, una experiencia que te hace madurar de seguro. Como dice la canción, “nadie dijo que sería fácil”, la verdad no puedo quejarme, ya que me ha dado algunas recompensas que aprecio mucho: estabilidad, una pareja encantadora y dos hijos felinos, y muchas posibilidades de materializar mis proyectos futuros. Los Aussies en general son una comunidad fácil de llevar, y comparado con otros lugares incluyendo mi tierra natal, es casi un paraíso donde todo funciona y ves donde se invierten tus impuestos, hay un buen nivel de tranquilidad, pero todavía consigo gente acá que se queja de todo, wow!, la famosa frase “problemas del primer mundo” es real, LOL.
¿Experimentaste el choque cultural? Si así lo fue, puedes darnos un ejemplo?
Totalmente, el shock es inevitable para quien quiera que decide migrar, no hay duda de ello. La manera en que los “aussies” (australianos) hablan el idioma inglés es única, un acento muy extraño que todavía hoy luego de cuatro años me da algunos problemitas para entenderlo.
¿Cual crees es el reto más fuerte cuando alguien emigra?
Sin duda alguna, la nostalgia es parte de nuestro equipaje tan pronto como pones un pie en el avión. Solo necesitamos lidiar con ella, es inevitable, nosotros escogemos si queremos que sea una carga o un saudade saludable.
¿Puedes contarnos un poco sobre tu nuevo proyecto?
Seguro, hay dos proyectos en los cuales trabajo actualmente. Uno está relacionado con cartografía interpretada de forma impresionista, inspirada por imágenes satelitales tomadas de Internet, enfocado en el concepto de conglomeraciones urbanas, un tema recurrente que puedes apreciar en mis trabajos previos. El otro proyecto en el que estoy trabajando es con mi pareja Vincent (quien también es artista plástico), relacionado con composiciones coloristas. Por supuesto, hay otros proyectos en mente, como los “retratos mapeados” que estuve haciendo recientemente, sin embargo prefiero dedicarme a los dos primeros, esperando que Sean suficiente para comenzar a participar en el medio de las artes visuales más pronto que tarde.
FΩRMIdea Londres, 12 de septiembre de 2017.
JORGE GONZALEZ ART - INSTAGRAM www.instagram.com/jlgq_art
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